martes, 14 de febrero de 2012

Si Critican, Que Critiquen…


Los árbitros cada que dirigen un partido están expuestos a ser criticados una y otra vez por cualquier aficionado, periodista o técnico que se encuentre a su alrededor por cualquier situación, decisión  y comportamiento que tenga en el terreno de juego, no obstante, a los silbatos nadie los prepara contra la crítica. Estos deberían verla como algo positivo, que los conduce a una auto evaluación y  siempre estarán en libertad de rechazarla si es injusta o si no viene al caso. 
Acéptela y digiérala      
La crítica puede ser constructiva, totalmente nefasta, o llegar a ser destructiva dependiendo de la forma en que cada árbitro la acepte y la digiera. Hay árbitros destrozados por las críticas  y desde que funciona el Internet, los comentarios anónimos están consiguiendo que estos se retraigan, pues prefieren callar sus logros y errores para no ser crucificados; algunos de ellos toman más en cuenta cualquier panfleto anónimo en la red que las declaraciones rigurosamente comprobadas.
Utilícela a su favor
La crítica puede ser hiriente y puede llegar a desmoralizar y deprimir, pero también puede ser utilizada para el beneficio personal y profesional, como una forma de mejorar. Se debe tener en cuenta, que cada comentario o crítica se toma dependiendo de la persona de la cual proviene, es decir, existen personas que solamente critican por criticar sin ninguna razón de peso aparente, solamente porque si,  esas críticas deben ser desechadas de insofacto.
Detenga su reacción
La mayoría de árbitros reacciona ante la crítica defendiendo, a capa y espada, su punto de vista. Lo primero que se debe hacer al momento de escuchar una crítica es detener la primera reacción; la reacción que ínsita a responder defensivamente o hasta agresivamente. Luego, se debe tratar de ver lo positivo de cualquier comentario negativo, para así disminuir la carga negativa que viene con el comentario. Especialmente si la persona que crítica es grosera y muy dura, es muy importante agradecer; unas simples gracias pueden provocar una reacción inesperada en el “criticón”.
Que no lo afecte
Por norma general se debe  agradecer  la crítica aunque esta sea muy dura y cruel, incluso, no se debe dejar que esta afecte el comportamiento. Otro aspecto importante es aprender de esta ya que algunas veces las críticas son correctas y tienen un sentido para ayudar a mejorar ciertas cosas que no están del todo bien. En conclusión, las críticas se deben tomar de manera calmada, recuerde que las palabras son como un regalo, lo esencial es educarnos para soportarlas, de lo contrario cada ocho días habría más árbitros  decepcionados de su profesión

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